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“El único cultivo importante en las islas Lípari es el de la uva, la cual, sea para vino, sea para pasas, se cuida especialmente en Lípari, Salina y Strómboli. El cultivo de la vid se ha duplicado en los últimos decenios en Lípari y se ha extendido mucho en las otras islas, en particular en Strómboli y Filicuri. En viticultura es en lo que más progresan los agricultores de las Lípari, o mejor dicho, es en lo que destacan realmente.
Las principales variedades de uva son la passulina y la malvagia, que son las más típicas, y la uva mostale, nombre genérico de las uvas para hacer vino, en concreto: mantuonico, uva negra grande, algo rojiza, con la cual se prepara vino tinto, y el llamado moscato nero, y la uva catatarata, las uvas blancas, de las que se obtiene el vino blanco y el muscat.
De mayor renombre disfruta la malvagia de las islas Lípari, en especial la de los alrededores de Malfa y de Santa Marina, en la isla de Salina, la única que produce malvagia. Es sin duda un vino excepcional, al que se le atribuye la robusta fuerza de aquellas gentes y que además posee, según el dicho de los liparotas, un asombroso poder curativo: “La malvagia purifica, magnifica, medica, fa l’occhiaja e poi sana”.
En las islas Lípari se preparan dos clases de uva pasa, la passulina y la passuli. La primera se hace con la pequeña negra minutilla, la otra principalmente con nocellana, pero también con la minnolattina y con la cusolia”.
Archiduque Luis Salvador, Islas Lípari, 1895, Traducció Associació Amics de l’Arxiduc, 2008
La importancia de la malvasía y la riqueza que ha generado en el tiempo ha provocado algunas decisiones administrativas significativamente llamativas, por ejemplo Salina esté dividida en varios “comune” (ayuntamientos) mientras que el conjunto del resto de islas forman un único “comune”, cuya sede está en Lípari.
Durante la excursión por tierra que hicimos en Salina pudimos ver grandes extensiones cultivadas con viñas, en particular entre Malfa y Lene.
La malvasía es un vino dulce de excelente calidad que pudimos degustar en Salina.
Teníamos una cita para visitar las bodegas Hauner pero desafortunadamente una avería en el barco nos impidió realizarla. Seguramente una buena excusa para volver algún día por Salina. La etiqueta de las botellas de malvasía Hauner está precisamente hecha con un grabado del Archiduque.
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