No menos rico es el mundo de los peces, de los que se dice que hay más de 140 especies, sin contar las divagantes, en esas aguas. Abundan las lampreas ( Petromyzon marinus) amantes de la mar abierta, cuatro especies de rayas y el llamado torpedo eléctrico, visitantes también de estas costas junto con las mielgas y otros escuálidos ( Squalus carcharias y Spinax acanthias). Más comunes son las morenas, de las que distinguimos dos variedades: Muraena helana y Muraena unicolor. Cerca de la costa son frecuentes las grandes anguilas, las polícromas julias o doncellas de hermosos colores y el picudo y bien armado Belone acus. Cinco son las especies de Labrus, y dos las del poco atractivo rape o pejasapo. Damos también con el extraordinario pez de San Pedro (Zeus faber), que los ibicencos llaman Gall de la Mar, y de vez en cuando con el gran pez espada ( Xyphias gladius). Mucho más frecuente son los atunes y el denton ( Dentex vulgaris) o Déntol en vernáculo. En el mar abierto encontramos cinco especies de tríglidos ( rubios) y en el puerto de Eivissa numerosas lisas.
Archiduque Luis Salvador de Austria. Las Baleares por la palabra y el grabado. Primera parte: Las Antiguas Pitiusas. Ed. Sa Nostra, Caja de Baleares. Palma de Mallorca. 1.982.
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