Animales salvajes
"Más característicos de la isla son el gato montés y la jineta, el primero parece haber medrado con fortuna en los bosques, aunque siempre se presenta en solitario. Persigue a conejos y liebres, asola los nidos de pájaros, que alcanza con gran habilidad incluso cuando se encuentran en las copas más elevadas y, diríase, inaccesibles. La jineta (Viverra gennetta), muy numerosa en la isla, es un animal de aspecto extremadamente delicado, con manto de color gris oscuro moteado en negro, con manchas blancas en los carrillos y la cola anillada en negro. Se conoce también una variedad de pelaje casi enteramente negro. La jineta vive en troncos vacíos de los árboles y en viejos edificios abandonados, tanto en llano como en los parajes montañosos. No desdeña por ello los desvencijados porches (buhardas) de las casas de pueblo, donde se oculta de día, para librarse a sus cacerías de noche, cuando la oscuridad ampara sus fechorías en los palomares y gallineros de las inmediaciones, que asalta con gran facilidad por muy altas que sean sus paredes y pequeños que puedan parecernos los resquicios que quedan entre ellas; no ha de extrañar, pues, que una vez en el lugar de autos no deje títere con cabeza ni desgraciado plumífero de que no haga su víctima. Si se la prende de pequeña es d fácil domesticación; añadiré al respecto que conozco a un señor de Palma que tiene desde hace años a uno de esos animales en cautividad.
La Mustela vulgaris, llamada "mostel" en mallorquín, es asimismo relativamente frecuente en la isla, y siendo aún de menor tamaño que su prima jineta, también causa estragos en los palomares de Palma, pues ávido de sangre, da muerte a sus víctimas, dejando totalmente exangües sus cadáveres desparramados. En los parajes montañosos de la isla y siempre en las proximidades de las habitaciones humanas tropezamos con Mustela foina. Apenas cernida la noche, abandona sus escondrijos, rodea las edificaciones y si logra penetrar en el gallinero mata a las ponedoras y se hace con ellas una tras otra hasta dejar vacío el corral.
Otro animal común es el erizo (Erinaceus europaeus) o "eriçó" de los isleños. Permanece oculto durante el día en las oquedades de los árboles más viejos o en madrigueras de fortuna practicadas en los acúmulos de piedras, y sale de noche en busca de opíparo banquete a base de caracoles, larvas y gusanos."
Archiduque Luis Salvador de Austria. Las Baleares por la palabra y el grabado. Mallorca: Parte General. Ed. Sa Nostra, Caja de Baleares. Palma de Mallorca. 1.982.
