Itaca

“Después del lugar, donde se aparta el camino hacia Pisso Aëtos, aparece el cabo roquero Tsi Paulinas, y sigue Punta Kalabri. Desde el último sube el camino suavemente. A una considerable altura circunscribe la bahia ancha de Aëtos encima del mar. A la izquierda se puede ver viñas y olivos, luego pendientes desnudos y matosos, arriba, donde se abre la Korako Spiliá, despeñaderos pelados.

Una crucecita de madera señala el lugar donde fue asesinado un hombre. Luego baja el camino un poco. Algunos olivos cuelgan con sus coronas encima del mar.

Desde Kalabrí Punda se puede, si uno sube la pendiente desnuda, llegar a Korako Spiliá, desde donde se disfruta de una vista maravillosa a la desembocadura del puerto; delante está Katsurbo y el Paleomilos de Kalabrí.

La cueva forma una bóveda con una punta, 15 pasos de largo y 5 de profundo; al lado unos despeñaderos impresionantes. En la Korako Spiliá vivía hace 35 años una familia; una mujer dio luz allá a cuatro niños, dos chicas y dos chicos. Esta cueva está curiosamente seca; hay muchas telarañas dentro.”

No lejos de Dexiá, hay bastante arriba en la pendiente la Marmarospiliá, la llamada gruta de las ninfas. La cueva se alarga un trozo a fondo. También por aquí hay una apertura, desde donde se puede ver un poco más lejos; pero un hombre no puede pasar. Debajo de la cueva hay campos y un hermoso valle de viñas a fondo.

Desde la colina en frente del Kastro llega un camino transitable hasta el depósito principal. Encima de su cerro se encuentran tres molinos de viento. El nombre es Milos Chamollios.

Siguen plantaciones de olivos. Hermosa la vista por encima de la bahía de Dexiá.

Si se sigue uno llega por el pequeño valle de Sta Dendra cubierto de olivos. En frente la colina de Boro con la costa del continente en el fondo. Así se llega al Deposito sta Dendra que está cubierto de piedras y donde se unen dos aguas procedentes de fuentes, uno desde Ayos Spiridion y el otro de Paganó. Un camino muy inclinado llega desde Sta Dendra hasta Ayos Spiridion. Aquí hay una tubería de agua. El depósito está cubierto de piedras y tiene tres arcos. La mejor de las fuentes es la de Ayos Spiridion.

Desde el banco redondo al lado de la iglesia de Ayos Spiridion se tiene una vista hermosa por encima del puerto de abajo, la bahía de Dexiá y la entrada del puerto con un fondo maravilloso de la costa. Encima de la iglesia de Ayos Spiridon hacia los despeñaderos crece un algarrobo gigante y encima de Sto Stefani está la iglesita medio derrumbada del Santo Elias. Desde Ayos Spiridon parte un camino roquero, en parte pavimentado, que va desde Apanuchorió hasta Aëtos. Se puede mirar por encima de la bahía de Dexiá con Katsurbo y toda la entrada del puerto de maravilla. Aquí también hay pequeños despeñaderos.

El siguiente saledizo que cierra Dexià, se llama Sotiro, según una pequeña iglesia del mismo nombre que ya está destrozada. Muy bonita la vista al molino viejo de Kalabrí más abajo. En una circunvalación uno se acerca ahora hacia Aëtos. Se gira a Patteritsi en un camino lleno de piedras y se domina encima de la Stella el Canal de Viscardo.

En la punta de Ayos Andreas que domina el faro con su casa bonita y la iglesita que lleva el mismo nombre, donde al lado hay algunas cisternas, sigue la punta de Boro, llamada Kavos stu kolonia, luego el vallecito de Lutsa con una pequeña playa y luego Kavos Elias con un baluarte viejo veneciano que defiende el embocadero del puerto con la que está casi en frente, la del Kastro. Desde el baluarte veneciano Kastro venecianó se ve y domina maravillosamente la embocadura del puerto, la islita de Katsurbo y el grupo de la alta montaña de Anoyí en el fondo. A la derecha a nuestros pies se encuentra el hermoso vallecito de viñas de Lutsa con algunos olivos grandes, a la izquierda el saledizo de Kastro, el Petalata Vunó sereno y la isla de Filaké.”