Travesía del Jónico y llegada a Paxos, Porto Gayo.
08/05/2013 11:58:22
Finalmente navegamos por la costa norte de Sicilia puesto que el parte meteorológico era bastante complicado por el sur. Eso nos dio derecho a pasar por el estrecho de Messina otra vez y parar en el puerto de Messina la noche del domingo 5 de mayo.
La travesía del Jónico ha durado 36 horas y hemos llegado a Porto Gayo en la isla de Paxos a última hora de la tarde del martes 7 de mayo.
La travesía ha sido un poco más difícil de lo previsto ya que ha habido olas bastante grandes de unos 3 metros durante la noche del lunes al martes.
La llegada a las islas de Paxos y Antipaxos ha sido emocionante, después de 7 días desde la salida de Puerto Pollensa en Mallorca, con un magnífico atardecer con cielos despejados.
Llegando ya hemos podido observar algunos de los puntos que buscamos en la costa oeste de Paxos. Por ejemplo, las cuevas de la focas; el Ortholiton, un gran islote hacia el centro de la costa oeste de la isla de Paxos; o el arco Sto generalatu.
La parte norte de la Isla de Antipaxos estaba preciosa al atardecer. Se observa el Cap Ketrós y algunas playas de arena.
Al cruzar el estrecho entre Paxos y Antipaxos nos encontramos con Porto Spuzzo, con el canal que indica el Archiduque y con la misma iglesia que dibujó en su día; y otra magnífica cala con algunos veleros.
Al llegar a Porto Gayo llama la atención tanto el escollo Zuane como la isla de la Madonna que marca la entrada al puerto, y en la que si sitúa un faro.
Al entrar hemos quedadomaravillados con la belleza del canal que nos adentra hasta el puerto, la orilla que corresponde a la isla de San Nicoló está perfectamente preservada.
Enseguida vemos una de las iglesias que mencionaba el Archiduque que asumimos de momento que se trata de Agios Joiannis.
Seguimos con el barco por el estrecho canal que nos llevará hasta el amarre pasando cerca de casas y restaurantes que conservan una arquitectura tradicional.
Ya hacia el centro del puerto podemos ver a la izquierda, y en la isla de San Nicoló, la iglesia de Agios Nikolaos, en la que aún destacan los olivos imponentes que la rodean.
A la derecha identificamos la Plaza principal que se halla en mitad del puerto y en las que se observan múltiples negocios.
La naturaleza es rebosante, nos recuerda a alguna de las islas de Croacia, tenemos justo en frente, a 50 metros, la Isla de San Nicoló con un frondoso bosquecito de pinos a media altura, olivos en la pendiente que llega hasta al mar, y arbustos y lentiscos que llegan hasta la orilla de la playa de piedras.
Porto Gayo es espléndido, un pequeño paraíso, perfectamente preservado, y con poca gente, al menos un martes 7 de mayo. Uno tiene la impresión de haber retrocedido en el tiempo.
