Mallorca :: Informes de comparación

"Por la superficie que les es dedicada estos son los cereales y leguminosas, es decir, trigo, cebada, avena, habas, judías, guisantes, etc., que representan algo más del 37 por ciento del total de los terrenos productivos (327.814,74 hectáreas); siguen los olivos, que ocupan casi el 8 por ciento; los algarrobos, con algo más del 2 por ciento; los almendros, con algo menos del 2 por ciento; las hortalizas, inclusive el cáñamo, lino y maíz, el 1 1/2 por ciento; los naranjos y limoneros, con el 0,11 por ciento; el resto de árboles frutales de toda clase, con el 0,13 por ciento; y el conjunto de moreras y chopos, cañaverales y chumberas, que sólo reprsentan el 0,16 por ciento. Si añadimos a estos porcentajes el del 1 1/2 por ciento correspondiente a encinas, algo más del 3 por ciento de los pinos, y algo más del 21 por ciento ocupado por el monte bajo y arbustivas ("garriga i selves"), he ahí una imagen de los principales cultivos presentes en la isla, junto con su ocupación respectiva de terreno. Por lo que hace al suelo productivo, pero no cultivado, su superficie asciende a algo más del 14 por ciento del total de tierras productivas.

En general cabe decir que el suelo y clima mallorquines son indicados para el cultivo de árboles, al igual que de cereales y leguminosas; con seguridad los primeros son los que constituyen principalmente la base de la agricultura mallorquina.

Aquellos árboles para los que las condiciones naturales isleñas parecen ser más favorables y cuya aportación relativa a la riqueza de la isla podría ser máxima son el olivo, la higuera, el algarrobo y el naranjo, aun cuando este último no se le dedique mucha superficie cultivable ni esté presente en todos los lugares. Siguen luego el almendro, cuyo cultivo parece haberse iniciado en época no lejana y adquirido auge muy recientemente, y la morera que, por el contrario, está en franca recesión; citemos por fin al nogal y al resto de los frutales."

Archiduque Luis Salvador de Austria. Las Baleares por la palabra y el grabado. Mallorca: Parte General. Ed. Sa Nostra, Caja de Baleares. Palma de Mallorca. 1.982.