Entre Aspra Aspitia y Ghermano
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Lo que dice el Arxiduc:
“Una punta con rocas arriba separa en la bahía la primera ensenada de la segunda que forma un puerto profundo, protegido completamente por el Cap Trakhila. En el fondo del mismo hay un bonito valle de olivos y cerca de la orilla al lado de un pequeño muelle de piedra, donde los pescaderos suelen anclar sus barcos, hay una iglesita con un ábside saliente y una IKONOSTASIS hecha de algunas tablas; unos huecos iluminan todo.”
“Vale la pena subir la colina Siró, de forma cónica, hecho de cal y mares. Se puede ver una punta pequeña del PARNASSUS además de la bahía de Sotiro Steno con la costa de la península en el fondo. Los pastores llevan sus cabras con palos a los prados de allí, donde comen las puntas frescas de las encinas pequeñas, tojos, mastiques y JUNIPERUS PHONICEA que crecen por allí. Son cabras bonitas, sobre todo marrón oscuros, con cuernos delgados, similares a las cabras de Mallorca.”
“A mano izquierda se nos ofrece encima de una colina de tierra el monasterio y abajo un jardincito con nogales, almendros y otros árboles frutales. El edificio tiene una forma irregular, abajo forma un ángulo obtuso cuya punta final cierra con una torre. […] En la placita cerca del convento donde holgazanean algunos perros pacíficos, crece un platanero ramoso. […] Aquí están los pisos para los monjes, que son 80: sacerdotes, monjes y chicos de todas las edades con el pelo con un moño detrás. El superior tiene un piso bonito con una terraza pavimentada, desde donde se ve todo el valle y una parte de las montañas de nieve en el otro lado del golfo.”
Datos proyecto Nixe III:
Seguimos dirección a Corinto y pasamos a la siguiente bahía, la de Dobrena. Llegando a dicha bahía nos encontramos con viento fuerte de noroeste de unos 30 nudos. En el vídeo podemos ver las imágenes.
Paramos en una pequeña cala, Ayos Yioannis, en la que hay únicamente cinco casas, entre ellas un restaurante.
Desde ahí el propietario del restaurante, y pescador, Giorgi, nos lleva hasta Osios Lukas que se halla a unos cuarenta kilómetros. Nos sorprende el contraste entre la ladera sur, que hace unos años sufrió un incendio, y la ladera norte que se halla llena de abetos y enjambres de abejas.
Llegamos a Osios Lukas y vemos algunas diferencias respecto a las imágenes que dibujó el Archiduque. La torre está modificada, hay nuevos edificios antes de la torre, no observamos el edificio contiguo a la torre justo encima de la entrada, existe un nuevo edificio, museo, enfrente de la iglesia. En cambio al iglesia se ve prácticamente igual.
El monasterio recibe muchas visitas y es bien conocido que muchos de los jóvenes de la zona se llaman Lucas en honor al santo. Muchos de los cambios se explican por el hecho de que cayó allí una bomba en tiempos de la segunda guerra mundial. De hecho, en algunos puertas se ven aún las marcas de los disparos. En esta imagen se observa el lugar en el que cayó la bomba.
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