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“El puerto de Kerí –supuestamente el antiguo PORT NATA- fue antes un puerto de piratas. Los barcos que venían del este tenían que pasar aquí la cuarentena en caso de sospecha de peste. El puerto está protegido bastante bien contra el mar del suroeste, pero no contra el sureste; el fondo es fango muy sólido.
El puerto de Kerí nos ofrece una orilla de grava con dos muelles salientes que protegen la salida del Limny de enarenamiento. El segundo muelle por dónde va la carretera que viene de la ciudad, llegan los olivos hasta la orilla, donde hay dos casitas.
Ahora queremos prestar atención a la pequeña isla vecina, Marathonissi. Marathonissi tiene hacia el Kerí el pequeño Marathiás, arriba cubierto de césped, luego la pequeña islita de Mikró Nissaki, los dos se llaman también Pondikonissia o islas de las ratas. Entre la última y MarathonissI se puede pasar con el barco.
Al lado de una punta alargada y arenosa está la casa que pertenece a Makrí – como toda la isla – y la iglesita y detrás una falda subiendo con olivos. Después viene una colina cónica con unas rocas que salen de vez en cuando y caen también hasta la orilla. Detrás la colina después de un collado hay unos despeñaderos altos hacia el noroeste, blancos, de vez en cuando grises y surcados, que forman una especie de Cabo. En la orilla hay una pequeña cueva con estalactitas pequeñas donde se puede entrar con un barco pequeño. En este sitio hay encinas y pinos. Después de un cabo blanco sigue una cueva doble con una playa con arena fina que se mete bastante hacia dentro; que delicia seria rodarse en esta arena después del baño. Luego hay otra cueva más ancha también con playa de arena y una pequeña playa al pie de los despeñaderos con capas esquinadas.”
En frente de Ay Sostis está la isla de Marathonissi, y en la parte noroeste encontramos los dos islotes que apuntan hacia el puerto de Limny Keri. Nuestra imagen hacia Kerí está tomada desde el mar.
Damos una vuelta a Marathonissi y no llegamos a identifcar el lugar desde el que el Archiduque había dibujado al costa oeste de Maratonisi. Después de dar la vuelta a la isla nos paramos en la zona de las cuevas. Una de ellas es bastante profunda.
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