Vista desde la terraza de la iglesia
“Cerca de la iglesia se extiende una terraza con bancos de piedra, en cuyos respaldos la hiedra trepa y rosales silvestres forman matorrales abundantes entre losas viejas para descansar. Desde aquí se puede abarcar mejor de una mirada todos los alrededores. Al lado se encuentra un viñedo, además varios cipreses, olivos, plátanos y encinas y detrás las copas verdes de los plátanos gigantescos. Solamente el calvo monte de Veliki Sto con su piedra gris y rocosa domina el oasis, lo demás todo es verde. Desde el Veliki Sto bajan suavemente las faldas con olivos y forman el alto de San Michele, cubierto de cipreses altos, cerca del cual transcurre la carretera. Extiende la miranda por el canal de Sabbiocello, donde terminan las colinas de San Michele, y por las diversas islas, justamente allí donde se extienden la ancha Bocca di Mezzo (Lopud), en la isla del mismo nombre, y Calamotta (Kolocep) y Giuppana (Sipan) a ambos lados y a la misma distancia, además por el imenso mar azul. En medio el exuberante jardín Gozze, un mar de verdor de todos los matices, donde un árbol compite con el otro por su rebosante abundancia. Cipreses oscuros, laureles de verde oscuro, claros álamos piramidales, álamos temblorosos, olivos, higueras, granados y palmeras, a veces, encinas, de las que una, elevándose con su muy extensa copa, da sombra a la capilla familiar de Gozzos.
Se puede estar sentado en esta terraza horas y horas, sin que uno quede harto de esta imagen de fresca vegetación.”
A.L.S.: Cannosa, Praga 1897
