Ciudad de los judíos
“Nos vamos dentro del crepúsculo de la tarde a la ciudad de los judíos. Ningún árabe, ninguna chilaba blanca, ninguna niña rebozada se ve; sólo nos encontramos con figuras delgadas y negras vestidos con el gabán oscuro y la facha roja, con calcetines marrones, zapatos con cierres, un trapo negro como turbante en la cabeza rapada. Figuras femeninas en la ya descrita forma pesada de vestir pero algunas veces con unas caras muy finitas se muestran en las ventanas medio rotas con rejas de hierro. Las callecitas están estrechas y sucias; alguna vez abiertas y otra con un puente encima que llevan unos arcos afiligranados y pilares según el gusto moro. También aquí se oye por la tarde unos rezos nasales que vienen desde la sinagoga; sinagogas hay bastantes en este barrio de la ciudad. Domina el gusto moro también en ellas; por eso uno cree estar dentro de una mezquita si no fuese por los bancos y las vitrinas para los valiosos rollos de la Tora.”
(f.6 en la ciudad de los judíos)
Archiduque Luis Salvador de Austria,Tunis. Ein bild aus dem nordafrikanischen leben, Heinrich Mercy, Prag, 1870
