Mallorca

"Además de los álamos comunes hay también otros árboles de cultivo como el álamo plateado (“àlber, populus alba”), que se dan de vez en cuando sobre todo en Valldemossa; la morera; el olmo (“om, ulmus campestris”),  que crece en lugares más húmedos, preferentemente cerca de las fuentes; el “cinamon” (melia azadaradi), utilizado sobre todo para bordear las avenidas de Palma; el “lledoner” (celtis australis), árbol, precioso que alcanza una altura considerable y que proyecta una generosa sombra. Encontramos esta especie en los patios de algunas fincas o cerca de las iglesias de las poblaciones, de modo que casi se puede considerar como árbol sagrado. También es frecuente en las proximidades de los torrentes. Al no crecer muy rápidamente, no es tan común como por su gran belleza y dureza de su madera merecería. Aquí o allá, pero sólo como árbol de adorno, tropezamos con el Ailanthus glandulosa, “pebreboner”, el sauce llorón (“desmai”) y el ciprés; estos últimos preferentemente en antiguos monasterios y ermitas, así como en las propiedades del marqués de Bellpuig, quien parece haber tenido una particular preferencia por estos árboles. Un tipo de sauce (salix alba) está siendo cultivado dese hace unos 25 años en la isla, sobre todo en Campos, cerca de Palma."

Archiduque Luis Salvador de Austria. Las Baleares por la palabra y el grabado. Mallorca: Parte General. Ed. Sa Nostra, Caja de Baleares. Palma de Mallorca. 1.982.

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